Brasil humilla a una debil Selección de China por 8 goles a 0, con hattrick de Neymar.
Brasil, que necesitaba de una victoria urgente y convincente para reivindicarse con sus hinchas, contó hoy para ello con la ayuda de la frágil China, a la que derrotó por 8-0 en un partido amistoso en el que fue clara la enorme diferencia entre ambas selecciones.
Neymar, en tres oportunidades; Lucas, Hulk, Oscar y Ramires, en una cada uno, abusaron de la fragilidad de los chinos y respondieron con goles y jugadas vistosas los abucheos que recibieron el pasado viernes en el estadio Morumbí de Sao Paulo, cuando sufrieron para vencer por un mínimo 1-0 a Sudáfrica.
Tres días después del abucheo por su opaca actuación ante Sudáfrica, la selección brasileña dominó el partido contra China de comienzo a fin, prácticamente no enfrentó resistencias y exhibió un amplio repertorio de jugadas y figuras que agradaron a los hinchas que acudieron al estadio Arruda de la ciudad de Recife.
La fácil victoria, sin embargo, contó con la ayuda de una ingenua China que está ubicada en el lugar 78 de la clasificación de la FIFA; que llegó a Recife con sólo 17 jugadores y cansada tras un viaje de 21 horas y que es de lejos el equipo más frágil enfrentado por Brasil desde que Mano Menezes asumió como seleccionador.
La China comandada por el español José Antonio Camacho, prácticamente sin opciones técnicas por la pobreza del banco de suplentes, se limitó a ver a los cinco veces campeones mundiales jugar con facilidad y vengar los abucheos sufridos el viernes.
Fue la primera vez incluso que Brasil se impuso por más de cuatro goles desde que es comandada por Menezes y la primera victoria por ocho goles de diferencia desde 2006.
China tan solo llegó a la portería brasileña por primera vez a los 16 minutos y tan sólo generó tres jugadas que amenazaron la portería de Diego Alves.
Tras varios intentos por la derecha con Hulk como principal protagonista, Brasil abrió el marcador en el minuto 22 por la izquierda con un intercambio de pases entre Oscar y Ramires que el último finalmente empujó con facilidad para vencer a Zeng Cheng.
Tres minutos después, Neymar, que ya había desperdiciado algunas oportunidades, amplió el marcador tras recibir libre frente a la portería china un pase impecable de Oscar tras una jugada de Hulk por la derecha.
Tras reducir la velocidad en los últimos minutos del primer tiempo, Brasil regresó de nuevo acelerada para la segunda etapa y tan sólo necesitó tres minutos para ampliar aún más el marcador con un gol de Lucas, que igualmente no enfrentó resistencia para empujar contra la portería china un pase azucarado de Hulk.
Cuanto minutos después el propio Hulk, que sustituyó en el ataque brasileño a Leandro Damian, finalmente consiguió su anotación al rematar un balón que Neymar estrelló en un poste.
Neymar volvió a aumentar dos minutos después tras recibir un levantamiento del lateral Marcelo y anotó su tercer gol siete minutos después tras un pase de Oscar.
El séptimo gol de Brasil fue marcado en su propia portería por Liu Jianye al intentar desviar un levantamiento y el octavo por Oscar tras empujar un penalti marcado por el árbitro en una falta contra Marcelo.
Una vez consolidada la goleada, Menezes colocó una selección totalmente diferente en la cancha al hacer los seis cambios permitidos.
Y al finalizar el partido, los jugadores se reunieron para agradecer los aplausos recibidos, que permiten olvidar los abucheos del viernes.
Alineaciones: Brasil: Diego Alves; Daniel Alves (m.61, Adriano), Dedé, David Luiz (m.75, Réver), Marcelo; Rómulo (m.77, Sandro), Ramires (m.60, Arouca), Oscar (m.80, Leandro Damiao), Lucas; Neymar (m.61, Jonas) y Hulk. Seleccionador: Mano Menezes.
China: Zeng Cheng; Zhao Peng, Liu Jianye, Yu Yang, Tang Miao; Zhao Xuri (m.77, Feng Renling), Hao Junmin (m.56, Zhang Yuan), Liu Hiang, Lu Peng; Gao Lin (m.77, Yang Xu) y Zhu Ting. Seleccionador: José Antonio Camacho.
Brasil, que necesitaba de una victoria urgente y convincente para reivindicarse con sus hinchas, contó hoy para ello con la ayuda de la frágil China, a la que derrotó por 8-0 en un partido amistoso en el que fue clara la enorme diferencia entre ambas selecciones.
Neymar, en tres oportunidades; Lucas, Hulk, Oscar y Ramires, en una cada uno, abusaron de la fragilidad de los chinos y respondieron con goles y jugadas vistosas los abucheos que recibieron el pasado viernes en el estadio Morumbí de Sao Paulo, cuando sufrieron para vencer por un mínimo 1-0 a Sudáfrica.
Tres días después del abucheo por su opaca actuación ante Sudáfrica, la selección brasileña dominó el partido contra China de comienzo a fin, prácticamente no enfrentó resistencias y exhibió un amplio repertorio de jugadas y figuras que agradaron a los hinchas que acudieron al estadio Arruda de la ciudad de Recife.
La fácil victoria, sin embargo, contó con la ayuda de una ingenua China que está ubicada en el lugar 78 de la clasificación de la FIFA; que llegó a Recife con sólo 17 jugadores y cansada tras un viaje de 21 horas y que es de lejos el equipo más frágil enfrentado por Brasil desde que Mano Menezes asumió como seleccionador.
La China comandada por el español José Antonio Camacho, prácticamente sin opciones técnicas por la pobreza del banco de suplentes, se limitó a ver a los cinco veces campeones mundiales jugar con facilidad y vengar los abucheos sufridos el viernes.
Fue la primera vez incluso que Brasil se impuso por más de cuatro goles desde que es comandada por Menezes y la primera victoria por ocho goles de diferencia desde 2006.
China tan solo llegó a la portería brasileña por primera vez a los 16 minutos y tan sólo generó tres jugadas que amenazaron la portería de Diego Alves.
Tras varios intentos por la derecha con Hulk como principal protagonista, Brasil abrió el marcador en el minuto 22 por la izquierda con un intercambio de pases entre Oscar y Ramires que el último finalmente empujó con facilidad para vencer a Zeng Cheng.
Tres minutos después, Neymar, que ya había desperdiciado algunas oportunidades, amplió el marcador tras recibir libre frente a la portería china un pase impecable de Oscar tras una jugada de Hulk por la derecha.
Tras reducir la velocidad en los últimos minutos del primer tiempo, Brasil regresó de nuevo acelerada para la segunda etapa y tan sólo necesitó tres minutos para ampliar aún más el marcador con un gol de Lucas, que igualmente no enfrentó resistencia para empujar contra la portería china un pase azucarado de Hulk.
Cuanto minutos después el propio Hulk, que sustituyó en el ataque brasileño a Leandro Damian, finalmente consiguió su anotación al rematar un balón que Neymar estrelló en un poste.
Neymar volvió a aumentar dos minutos después tras recibir un levantamiento del lateral Marcelo y anotó su tercer gol siete minutos después tras un pase de Oscar.
El séptimo gol de Brasil fue marcado en su propia portería por Liu Jianye al intentar desviar un levantamiento y el octavo por Oscar tras empujar un penalti marcado por el árbitro en una falta contra Marcelo.
Una vez consolidada la goleada, Menezes colocó una selección totalmente diferente en la cancha al hacer los seis cambios permitidos.
Y al finalizar el partido, los jugadores se reunieron para agradecer los aplausos recibidos, que permiten olvidar los abucheos del viernes.
Alineaciones: Brasil: Diego Alves; Daniel Alves (m.61, Adriano), Dedé, David Luiz (m.75, Réver), Marcelo; Rómulo (m.77, Sandro), Ramires (m.60, Arouca), Oscar (m.80, Leandro Damiao), Lucas; Neymar (m.61, Jonas) y Hulk. Seleccionador: Mano Menezes.
China: Zeng Cheng; Zhao Peng, Liu Jianye, Yu Yang, Tang Miao; Zhao Xuri (m.77, Feng Renling), Hao Junmin (m.56, Zhang Yuan), Liu Hiang, Lu Peng; Gao Lin (m.77, Yang Xu) y Zhu Ting. Seleccionador: José Antonio Camacho.
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