Tras aportar ya dos tantos al 0-3 sobre el Guaraní en la ida de la final del Campeonato Paulista, Neymar volvió a bigolear ayer en el partido de vuelta, saldado con un 4-2 que permitió al Santos encadenar su tercer título consecutivo. Es la primera 'triple' corona paulista del conjunto 'peixe' desde la lograda con Pelé en 1967, 1968 y 1969. Neymar, líder del Santos en 2010 y en 2011, refrenda así su condición de crack extraordinario.
A sus 20 años, el internacional brasileño se salió nuevamente, como en el encuentro intersemanal ante Bolívar en la Libertadores (8-0), cuando marcó dos goles y dio otros dos. Ayer, en el Morumbi de Sao Paulo, Neymar firmó el 2-1 de penalti, tras una mano en el área rival (8'), y levantó al público de sus asientos en el 3-2 (71'): dribló a tres marcadores, envió el balón a Juan, quien se lo devolvió de envío cruzado hacia atrás para que el fuera de serie 'mojara' de disparo fuerte y colocado.
Además, Neymar inició la jugada del 1-0, materializado en el minuto 1 por Kardec, también autor del 4-2, ya en el descuento y entre 'olés' de la grada. Por parte del Guaraní vieron puerta Fábio Souza (1-1/4') y Mendes (2-2/16').
El partido llevó la firma de Neymar. El crack controlado por el Barça evidenció su temple incluso al ejecutar la pena máxima: el defensa contrario Domingos intentó desconcentrarle hablándole sin parar, pero Neymar ni se inmutó y, todo sangre fría, engañó al meta Emerson.
Sus escapadas e incursiones siempre llevaron peligro, y Neymar, que nuevamente ofreció celebraciones mediáticas en los goles del Santos, acabó instando a los espectadores a sumarse al festival con sus cánticos y aplausos.
Visto ya por muchos de sus paisanos como leyenda viva pese a su juventud, Neymar se medirá el 9 de junio a Messi en un amistoso en Nueva Jersey (EE.UU.).
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