"EL OZIL DE LA FABRICA"

La Fábrica del Real Madrid sigue dando de qué hablar allá donde sus futbolistas agarran una pelota. Está sucediendo en el Sudamericano sub 20 que se está disputando en Argentina, donde el madridista Cristian Benavente, defendiendo los colores de Perú, está llevando a su selección rumbo a la segunda fase. Cristian tiene ascendencia peruana por parte de su madre. Ya fue reclutado por la federación peruana hace dos años para el Sudamericano sub 17. Ahora, con 18 años, se ha echado a su selección sobre su espalda. Ha marcado dos goles, ambos de penalti cometidos sobre él mismo, que han servido para empatar (3-3) ante Uruguay y ganar a Venezuela (1-0). Esta madrugada se midió a Ecuador y el viernes cerrará la primera fase con Brasil. Están muy bien colocados para pasar a la segunda fase. El apodo Cristian tiene el país a sus pies. Por algo en el equipo ya le han bautizado. "Sí, algo escuché de galáctico, como llamaban a los del Madrid, ja, ja", reconoce a MARCA desde la Ciudad de San Juan, al noroeste de Argentina. A Bena, como le nombran los narradores de su país, no le tiembla el pulso en la competición. "Esperaba un buen resultado de mi trabajo, porque confío en mí mismo y para eso trabajo muchísimo en el Madrid", asevera. Cristian, un mediapunta vertical, creativo, con regate y mucho gol, tiene ficha del Castilla pero está jugando con el Juvenil A. "Juego donde el club me necesita... Yo tengo mucha paciencia, mucha tranquilidad, no me precipito y cuando me den la oportunidad la aprovecharé y ya está". Le comparan con Özil El madridista, que lleva en la casa blanca desde que tenía ocho años (2002), asume con tranquilidad todo lo que se habla sobre él en el país de la selección bicolor. "En Perú hay mucho fanatismo por el fútbol, estoy muy sorprendido y a la vez contento de lo que estoy viviendo, veo que la gente me está valorando. Me comparan mucho con Özil y para mí es un orgullo". Tal es su tirón que un programa de la televisión peruana vivió el partido con su padre, que había viajado a Lima, y le comunicó en directo con él tras la última victoria. A pesar de que es su segunda estancia con el combinado rojiblanco, todavía no se ha decantado entre Perú y España. "Sería precipitado responder a esa pregunta en este momento. Yo en el fútbol vivo el día a día. No me gusta pensar a largo plazo". Cuando marcó su primer gol, se acordó de su abuela peruana, fallecida en 2011. "Miré al cielo y se lo dediqué. Fue muy importante para mi nexo con Perú"